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Las Fallas de Valencia, que se celebran anualmente en marzo, son una vibrante celebración de arte, cultura y comunidad. El festival honra a San José, patrón de los carpinteros, y presenta una extraordinaria exhibición de grandes esculturas de intrincado diseño llamadas "fallas". Estas imponentes creaciones, a menudo satíricas y con una fuerte carga política, se construyen con materiales como madera y papel maché. Durante toda la semana, la ciudad vibra con desfiles, fuegos artificiales, música y gastronomía tradicional, incluyendo la famosa paella. Un momento destacado es "La Mascletà", un espectáculo pirotécnico diario que cautiva al público con sus potentes ritmos. El festival culmina el 19 de marzo con la espectacular quema de las fallas, que simboliza el triunfo del bien sobre el mal. Las Fallas no son solo un festín visual; fomentan el espíritu comunitario, con los barrios colaborando para crear sus propias fallas. Reconocido por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial, el festival ejemplifica la riqueza del patrimonio cultural y la expresión artística de Valencia.